Cuando hablamos sobre la nube en términos informáticos, nos referimos a el acceso a información personal o al uso de aplicaciones directamente en internet sin la necesidad de almacenar ningún tipo de información localmente en su dispositivo. Es decir, si tenemos un documento en la nube, quiere decir que tenemos la posibilidad de ver dicho documento desde cualquier dispositivo conectado a Internet siempre que cuente con las credenciales apropiadas para ver dicha información.
Cuando hablamos de credenciales, queremos decir que para ver el contenido de nuestros archivos en la nube son necesario claves de acceso a recursos como el correo electrónico o una cuenta en la empresa que está proporcionando el servicio.
Como usuario o cliente final, uno de los servicios más utilizados es el de almacenamiento en la nube. La principal ventaja es que tenemos la posibilidad de guardar Documentos, Imágenes, Multimedia, Programas o cualquier tipo de archivos organizados en carpetas para poder manipular dicha información desde cualquier dispositivo conectado a Internet.
El principal inconveniente es que si la conexión a Internet se interrumpe, no podremos tener acceso a los datos almacenados en la nube.
Existen muchas maneras de tener un espacio gratuito en la nube y la más utilizada esta ya incluida en cada cuenta de correo electrónico de Gmail o Hotmail que tengamos.
Si tienes una cuenta de correo de Gmail, automáticamente ya tienes 15Gb de regalo por concepto de Almacenamiento en la nube de parte de Google.
Para poder disfrutar de ese espacio de almacenamiento gratuito debes utilizar tus credenciales de usuario y contraseña de correo electrónico en el explorador de Google Chrome y tendrás acceso a todas las aplicaciones de Google y entre una de ellas podrás encontrar una aplicación llamada DRIVE.
Drive, es el nombre de la plataforma de almacenamiento de Google y todos los que tenemos una cuenta de correo de Gmail tenemos un pequeño espacio de 15Gb donde podemos almacenar todo lo necesario para nuestros trabajos más importantes.
Google ofrece una serie de planes de pago para incrementar el espacio de almacenamiento en caso de ser necesario.
Del mismo modo existen muchas otras plataformas de almacenamiento en la nube como por ejemplo, Dropbox, Mega, OneDrive, iCloud, etc. Donde la filosofía es la misma, cuando creas una cuenta con cada una de estas empresas tienes acceso a un espacio limitado gratis con la opción de aumentarlo por un pago mensual o anual.
En resumen, comprendiendo que la nube nos facilita el trabajo conectando desde cualquier dispositivo nuestra información y programas y con todas las opciones disponibles para almacenar información es posible sentirse abrumado con todo este asunto, pero lo que si debemos tener claro, es que la nube llegó para quedarse y ser parte de nuestro día a día en nuestro trabajo y vida personal.
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